Ir al contenido principal

¿Estás orgulloso de mí?


Tanta frialdad en esa mirada, hizo que mi corazón se convirtiera en hielo... Fuiste tu... siempre fuiste tú! y yo me quede observándote y dije cuanto te amo, observando q me alejaba, observando q me iba de tu lado... Gracias por alejarme, gracias por darme motivos para irme de aquí, sino aun estuviese sin mirar al espejo y pensando en ti. Ahora, puedo mirarte sin tener que sentir esa lágrima que roza mi mejilla, Hace tanto que no veo la luz del día, mis manos parecen manos talladas al son de una melodía, madera pura, madera fina. Me da tanto orgullo sentir tu lejanía, sentir como regresas luego de verme disfrutar la briza, la sonrisa de quien en estos momentos no eres tú. Solo me deseas porque otro me contempla, solo quieres volverme a ver, porque notas lo feliz que soy, y con tu presencia piensas, que te volveré a querer. Ya no es en ti, en quien más pienso cuando me acuesto, ya no es en ti en quien recuerdo como un príncipe dispuesto a soñar por su princesa. No siento odio, tampoco amor, solo siento que esta página de mi libro ya se cerró. Lo he superado, he vuelto a mirarme al espejo, he notado nuevamente la belleza de una gran sonrisa, he notado que he vuelto a ser yo. Y con la luna de testigo y la briza como reflejo, solo tengo una pregunta que hacerte… ¿Estás orgulloso de mí? Yo si lo estoy, porque por primera vez en mi vida pude ponerme los pantalones, y dejar de pensar en ti, para poder vivir mi vida con un nuevo amor.

© Derechos de autor, Sheila Rosa Castro – 2011


Comentarios

Entradas populares de este blog

Sin daños a terceros. (Has llegado tarde)

Tengo ganas de huir. De todas formas he llegado tarde. Tengo ganas de salir corriendo, y dejar este inmenso cuento, con sus hojas en blanco y su tinta regándose. Que enojo tan grande tengo adentro de mí. ¿Acaso no duermes con reloj? ¿Acaso no notas la claridad del día? Porque haz llegado mas tarde que yo. Imbécil. ¿Por qué? Me hiciste dar ese paso tan grande, y ahora vuelves, sin tu reloj, en la noche, queriendo saber un porque, sin ni siquiera ver tu “cuando”. Sin ni siquiera fijarte en tu “donde”. Esto debe ser una broma. Una tonta broma en donde no hice lo que pensé que hice. En donde tu… En donde ambos seguimos viéndonos en aquel reflejo incomprensible. Me encantaría dejar las cosas como están. Morir sola, y que a mi lado este  quien escogí como si fuese mi error mundano. Que mi mente arda de tanto pensarte, que mis pensamientos no tengan fin, pero que te piense tanto y tanto, que mi cabeza ya no aguante. Este será nuestro único secreto. Vivir esta vida llena de injusticia, a...

Amor a Distancia

Sintiendo que poco a poco nos vamos conociendo más, mi memoria se llena de tus recuerdos, de tu nombre. Y es tu nombre quien me hace sonreír, te reflejas en mi espejo, mas cuanto me encanta que te reflejes en el mi bello Narciso. Tan bello como el amor que siento por ti, tan rudo como las situaciones que a diario frecuentamos, pero nos amamos, nos adoramos. Tan clara que esta el agua, y puedo llegar a ver tu vida pasar por 10 inmensos segundos, los cuales me dejas sentir lo imposible que sería vivir sin el anhelo  de tenerte aquí. Vive, vive amor mío, sonríe, y vive, que por ti es por quien amare toda mi vida. Corre, corre como si jamás hubieras corrido, como un niño cuando aprende a caminar, explora como nunca antes jamás. Mi cielo, mi terciopelo, eres mi todo y a la misma vez eres mi nada, te siento tan cerca, pero la lejanía me agarra con su malvada garra. Lejos estas, y no me queda nada más que solo tu recuerdo, que solo un papel con el reflejo de lo que en algún momento fuis...

Tiempo para cerveza.

Me encontraba a pasos de ti hace un tiempo atrás, tu ni cuenta te diste. Así como en muchas otras cosas lo hiciste. Pasamos tanto y nos dimos tan poco. Recuerdo que nos encontrabamos ahi… solos… finalmente solos. Pero que mucho nos costo estar en esa situación juntos. Y uno al lado de otro sin decir nada, y asi ibamos y nos dábamos cuenta de que estábamos bien, de que ese tormento no pasaría, de que solo fue una noche más en la que fue un malentendido. Supongo que eso pasaba por tu mente. Pero la mia parecia un tren a toda velocidad, sintiendo ese viento fuerte en la cara, como cuando alguien apenas abre la ventana del tren por donde viaja. Y te pega fuerte. Se mete por todo tu cuerpo y te hace sentir esa forma templada en que tu cuerpo se va convirtiendo. Yo quizas, viaje por mucho tiempo en ese momento. Mi mente se iba a volar, daba vueltas, hacia lo que fuese por no estar conmigo. Mientras te veía a ti tan feliz, intentando hacerlo otra vez… intentando ver si estoy bien con tu broma...